"Cuentan que una vez, se reunieron todos los sentimientos y
cualidades del hombre.
Cuando la Pereza había bostezado por tercera vez, la Locura les propuso jugar al escondite.
La Intriga levantó la ceja y la Curiosidad, sin poder callarse preguntó ¿escondite? El Entusiasmo danzó, seguido de la Euforia, la Alegría dio tantos saltos que terminó por convencer a la Duda y a la Apatía, que nunca se interesaban por nada.
1...2...3... comenzó a contar la Locura: la primera en esconderse, fue la Pereza, que como siempre cayó detrás de la primera piedra del camino; la Fe subió al cielo y la Envidia se escondió detrás de la sombra del Triunfo, que por propio esfuerzo había conseguido llegar a la copa más alta del árbol.
La Generosidad casi no logra esconderse, porque cada lugar que encontraba le parecía bueno, para alguno de sus amigos: si era un lago cristalino, ideal para la Belleza, si era la copa del árbol perfecta para la Timidez, si era una ráfaga de viento, magnífica para la Libertad.
Así es que terminó escondiéndose en un rayo de sol. El Egoísmo en un lugar bueno desde el principio, ventilado cómodo pero solo para él. La Mentira se escondió detrás del arco iris y la Pasión y el Deseo en el centro de los volcanes.
Cuando la locura terminaba de contar el Amor todavía no había encontrado lugar para esconderse, pues todos estaban ya ocupados, hasta que buscando vio un rosal y cariñosamente decidió esconderse entre sus flores. Concluyó la Locura y comenzó la búsqueda. La primera en aparecer fue la pereza apenas a tres pasos de una piedra.
Sintió vibrar a la Pasión y al Deseo en los volcanes; en un descuido encontró a la Envidia y claro pudo deducir donde estaba el Triunfo. Al Egoísmo no tuvo que buscarlo, el solo salió disparado de su escondite que era en verdad un nido de avispas. De tanto caminar la Locura sintió sed y al aproximarse a un lago descubrió a la Belleza.
La Duda fue más fácil de encontrar estaba sentada sobre un cerro sin decidir dónde esconderse y así iba hallándolos a todos: al Talento entre la hierba fresca, a la Angustia en una cueva oscura... pero el Amor no aparecía por ningún lugar. La Locura lo busco detrás de cada árbol, debajo de cada roca del planeta y encima de las montañas.
Cuando estaba a punto de darse por vencida, encontró un rosal y comenzó a mover sus ramas con energía, entonces escuchó un grito doloroso, había herido al Amor en los ojos con las espinas de una rosa. La Locura no sabía qué hacer para disculparse, lloró, rezó, imploró, pidió perdón y al final le prometió ser su guía para siempre... Eternamente."
¿Mario Benedetti?
Este cuento lo escuché la tarde del sábado pasado. Rodeada de alfombras de ricas lanas, lámparas de brillos infinitos, maderas nobles y espejos venecianos...
Cautivada por el relato, y a ratos muy emocionada presencié, orgullosa, como una pareja joven e ilusionada se declaraban su Amor delante de nosotros, sus familiares y amigos. Contaban al mundo lo mucho que se querían y lo felices que eran al proclamarlo.
..."Prometo dedicarte todos mis días y todos mis besos", dijo Él
..."Prometo dedicarte todos mis besos y todos mis días", dijo Ella.
Y así, con esas sencillas palabras, sellaron su precioso amor...
¡Felicidad para siempre A. y M.!... Eternamente.
Nos vemos y nos leemos pronto
Cuando la Pereza había bostezado por tercera vez, la Locura les propuso jugar al escondite.
La Intriga levantó la ceja y la Curiosidad, sin poder callarse preguntó ¿escondite? El Entusiasmo danzó, seguido de la Euforia, la Alegría dio tantos saltos que terminó por convencer a la Duda y a la Apatía, que nunca se interesaban por nada.
1...2...3... comenzó a contar la Locura: la primera en esconderse, fue la Pereza, que como siempre cayó detrás de la primera piedra del camino; la Fe subió al cielo y la Envidia se escondió detrás de la sombra del Triunfo, que por propio esfuerzo había conseguido llegar a la copa más alta del árbol.
La Generosidad casi no logra esconderse, porque cada lugar que encontraba le parecía bueno, para alguno de sus amigos: si era un lago cristalino, ideal para la Belleza, si era la copa del árbol perfecta para la Timidez, si era una ráfaga de viento, magnífica para la Libertad.
Así es que terminó escondiéndose en un rayo de sol. El Egoísmo en un lugar bueno desde el principio, ventilado cómodo pero solo para él. La Mentira se escondió detrás del arco iris y la Pasión y el Deseo en el centro de los volcanes.
Cuando la locura terminaba de contar el Amor todavía no había encontrado lugar para esconderse, pues todos estaban ya ocupados, hasta que buscando vio un rosal y cariñosamente decidió esconderse entre sus flores. Concluyó la Locura y comenzó la búsqueda. La primera en aparecer fue la pereza apenas a tres pasos de una piedra.
Sintió vibrar a la Pasión y al Deseo en los volcanes; en un descuido encontró a la Envidia y claro pudo deducir donde estaba el Triunfo. Al Egoísmo no tuvo que buscarlo, el solo salió disparado de su escondite que era en verdad un nido de avispas. De tanto caminar la Locura sintió sed y al aproximarse a un lago descubrió a la Belleza.
La Duda fue más fácil de encontrar estaba sentada sobre un cerro sin decidir dónde esconderse y así iba hallándolos a todos: al Talento entre la hierba fresca, a la Angustia en una cueva oscura... pero el Amor no aparecía por ningún lugar. La Locura lo busco detrás de cada árbol, debajo de cada roca del planeta y encima de las montañas.
Cuando estaba a punto de darse por vencida, encontró un rosal y comenzó a mover sus ramas con energía, entonces escuchó un grito doloroso, había herido al Amor en los ojos con las espinas de una rosa. La Locura no sabía qué hacer para disculparse, lloró, rezó, imploró, pidió perdón y al final le prometió ser su guía para siempre... Eternamente."
¿Mario Benedetti?
Este cuento lo escuché la tarde del sábado pasado. Rodeada de alfombras de ricas lanas, lámparas de brillos infinitos, maderas nobles y espejos venecianos...
Cautivada por el relato, y a ratos muy emocionada presencié, orgullosa, como una pareja joven e ilusionada se declaraban su Amor delante de nosotros, sus familiares y amigos. Contaban al mundo lo mucho que se querían y lo felices que eran al proclamarlo.
..."Prometo dedicarte todos mis días y todos mis besos", dijo Él
..."Prometo dedicarte todos mis besos y todos mis días", dijo Ella.
Y así, con esas sencillas palabras, sellaron su precioso amor...
¡Felicidad para siempre A. y M.!... Eternamente.
Nos vemos y nos leemos pronto
Pues amar es lo más cuerdo que he hecho... Felicidades a esa pareja de sensatos.
ResponderEliminarTe doy las gracias en su nombre, son unos afortunados.
Eliminarun beso del Sur, Princesa
Muy bella ceremonia!
ResponderEliminarFue bonita y entrañable... muy emotiva.
EliminarUn beso del Sur, José
El compromiso encierra una enorme belleza. Me parece a mí que además de ser un gesto de generosidad y confianza es un gesto de libertad.
ResponderEliminarPrecioso el cuento, enmarcado en la ceremonia debió ser muy emocionante.
Oyeeeeeeeee no habrá sido la Princesa? Que eso nos lo tienes que ir contando de a poquito :)
Besos, muchos, poeta mía.
Noooo!!!, todavía faltan algunos meses... Fue un primo suyo. Ya se sabe, se casan todos casi a la vez, a la misma edad.
EliminarYa os iré contando como tu bien dices, de a poquitos... A propósito, ya tenemos zapatos!
Un beso desde cerquita, LuisaBonica
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarQue emocionante, amiga Oles.
ResponderEliminarYa conocía este cuento, y cada vez me gusta más.
Gracias por recordármelo.
Un beso.
De nada Rojo, es una alegoría, un guiño al amor...
EliminarUn beso desde cerquita
Conocía este cuento, Oles, pero ahora lo he podido leer despacio. Es curioso cómo cada sentimiento, pasión noble o lo contrario se delata en su escondite. Para bien o para mal. Locuras por amor, que no significa que el amor sea una locura ni se haya vuelto loco... Menudo enredo;-)
ResponderEliminarUn beso enorme, querida oles... desde Tarraco.
A mí me sorprendió, nunca supe de él... y me pareció bello y perfecto para la ocasión. Lo mejor del cuento su final, pues no hay amor que no tenga en algún momento su pizca de locura... ¿o no...?
EliminarUn beso Apañao del Sur, SunsiPresiosa
Zapatos??? me interesa... cuéntame lo cómodos que son y lo esbelta que te hacen, el color y material...es lo que más me cuesta, lo que más sufro y lo primero que me quito tras el primer baile!!!!!
ResponderEliminarBesos Oles, gracias por el cuento, pura alegoría de las emociones
Ay, Martika que los zapatos son pa la Niña... que nos hacían falta para la primera prueba del vestido.
EliminarYo todavía no tengo nada, ni zapatos, ni vestido ni ná de ná. Aunque ya le tengo echado el ojo a una zapatería, (Menbur), que tiene cosas bonitas y bien de precio, pero no sé como serán de cómodos... los zapatos, digo.
Un beso del Sur cargado de comodidad, Martika
Cuando locura y amor se encuentran, no hay quien los pare. Cuando locura y amor se encuentran, no hacen falta palabras. Y cuando locura y amor se encuentra solo ellos entienden y los demás que digan ...porque no saben lo que es si se encuentran.
ResponderEliminarEres una romántica empedernida caraColes!!!
Pues va ser que si, Gran T. que dices verdades como templos neoclásicos: que la locura y el amor juntos son inmensamente felices, y que yo soy una romanticona sin remedio.
EliminarUn besico del Sur, GranT