lunes, 27 de octubre de 2014

ANTIGUOS E-MAILS


Giglio.blog
Verás, lo que te voy a contar no es leyenda urbana ni cuento chino. No se trata de un vulgar cotilleo, ni de un chismorreo de pueblo añejo con viejas y viejos añejos; te hablo de algo totalmente simple y en tiempos hasta normal. Sé que lo has visto, pues en tu casa hay alguno que otro. Pero también sé que no contienen lo que yo tanto añoro, lo que tanto echo de menos... Te hablo de los sobres llenos de cartas. De las cartas llenas de besos. De los besos llenos de amor.
No hace tanto tiempo a los buzones de los portales, a las puertas de las casas, a los soldados en las milicias, a los rubios, a las morenas a los altos y a las bajitas, llegaban cartas... cartas de amor. Franqueadas con sellos de color azul y a veces rosa que hacían que la ilusión rondara las mentes y los cuerpos de sus destinatarios, haciéndolos por un ratito, o por muchos, inmensamente felices.
Se describían los deseos, las ganas, los "te quiero", con letra redonda o cursiva... con boli de punta fina o con pilot negro, o si ya era muy barroco el amor, con pluma de tinta china. Era ese folio en blanco, escaparate de sentimientos y afectos, del amor compartido o solo fingido... era, esa hoja de papel, testigo de mil poemas, de mil requiebros de tantos y tantos besos...
Escribíamos... dibujábamos con cientos de grafías lo que el corazón dictaba, lo que las ganas contaban. Y esperábamos con ansias que ese alguien nos contestara. Que nos dijera cuán feliz le había hecho esa carta recibida; esa misiva de amor, esas letras contenidas... Secretos que encerrados en un sobre, quedaban guardados en el cofre de las letras, hasta que el recibidor lo abría y los leía, los interpretaba.
Y las cartas iban y venían a los buzones. Subían y bajaban a los afectos. Llevaban y traían las canciones, los poemas que contaban cuánto nos queríamos... cuánto nos amaban.
Eran cartas... Esas cartas... Cartas de amor.
via Pinterest


Nos vemos y nos leemos pronto
  


14 comentarios:

  1. Oles! conservo una caja entera llena de ellas...en la gripe de este año las volveré a releer entre frenadoles, ya es tradición. Son de la mili, de mis hermanas cuando nos separaban en verano para aprender inglés, incluso alguna del primer novio. Están amarillentas y como dices llenas de garabatos, corazones y labios que tiran besos. También las hay burlonas poniendo verde a la profe de turno y alguna breve, muy breve de padre que más parecía correo comercial a no ser por el fuerte abrazo que me sabía de memoria, si cerraba los ojos lo notaba grande, protector y apretado.
    PD: desde que existen los wats...los mails decaen en picado también ;((

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  2. Yo también tengo un tesoro de esos que tu violentas cuándo pasas la gripe de cada año. Y también leo y releo cada una de ellas con tu misma añoranza.
    Los wats son útiles por inmediatos; los mails son recurrentes... pero el placer de recibir una carta escrita con boligrafo o lápiz, Ay!, no tiene parangón
    Un beso del Sur, Martika

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  3. Yo no conservo tantas cartas de amor...porque quizá escribí más de las que recibí.
    Pero conservo otras muchas, que sin ser específicamente de amor, también tienen un alto valor sentimental, aunque sea sólo por la emoción de esperar al cartero, para ver como se inclinaba ante el buzón para introducir esa carta, escrita a mano, que nos conectaba con nuestros amigos, hermanos, primos y demás elementos subversivos.
    Mi enhorabuena a todos los que recibían cartas de amor, y tienen la suerte de poder releerlas.
    Y por supuesto, para ti, amiga Oles, no te puedes imaginar como te envidio, jajajaja.
    Como se escribiría en una carta... besos y abrazos.

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    1. Pues por lo menos tienes la satisfacción de haber escrito cartas de amor, hay quien nunca ha podido.
      Yo recuerdo que los besos los dibujabamos así: XXX, los abrazos solo los mandábamos.
      Un Kiss desde cerquita, Rojo

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  4. A vuelta de correo, querida Oles. Así eran esas cartas larguísimas que guardo en una caja de cartón duro... a rayas verdes y blancas. Literatura en estado puro. Yo conocí "de verdad" al jefe de la república en los entresijos de sus expresiones escritas, de sus exclamaciones, de lo dicho y de los silencios... De la sencillez, ternura, delicadeza. También del esmero en la caligrafía;)))

    Qué post tan bonito. Es parte de nuestra historia, de una forma de amar que prácticamente termina con nuestra generación. Tenía la necesaria lentitud que precisa poder sentir para saber derramarlo -como un tarro de esencias- en un papel en blanco.

    Gracias, Oles bonica. Un beso enorme desde Tarraco.

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    1. Me gustan esas cajas... y lo que contienen. En esas cartas, se conocian de verdad a las personas, y se querían más cuantas más cartas te mandaban.
      Besos del Sur , SunsiPreciosa

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  5. Escribir en papel es un acto físico que requiere reflexión, tiempo, dedicación, ... Si tiene destinatario, además has de ponerte en el lugar del otro, imaginar la conversación, llegar a sentir su presencia. La inmediatez tiene sus (pocas) ventajas, pero como relación, no tiene comparación.
    Los buzones están llenos de extractos del banco que nadie mira, no esperan a ser abiertos.

    Saludos!

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    1. Todo un ritual, una liturgia. Todo lo que hoy escribimos en una carta es: nada.
      Nos apañamos con la inmediatez y lo rápido. Pero dónde se ponga una carta... no hay comparación posible.
      Saludos desde el Sur

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  6. Para mí es uno de los precios-alto, muy alto-que hemos pagado a causa de internet.
    Adoro internet pero echo de menos las cartas. Siempre.
    Siempre me ha gustado escribirlas y la espera era intensa, a veces decepcionante y otras con final feliz.
    ¡Ah, las cartas, Oles, el amor, la sensibilidad...!
    Besos, muchos, poeta.

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    1. Además cuánta razón tiemes, es un precio muy alto el que hemos pagado a causa de Internet. Y aunque tiene la compensación de la rapidez y lo inmediato, una carta de amigo, novio, o familiar, escrita en su papel finito, con su sobre y su sello, es un placer recibirla. Lo otro se trata solo de un doble click.
      Un beso dese cerquita, LuisaBonica.

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  7. Disiento Oles@ ... .com. Con los e-mails todavía se pueden hacer alguna que otra cosa mágica. Si no te lo crees, solo tienes que ponerte la chistera y pasearte por la "bandja de entrada"

    Bss!!!

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  8. Es cierto, con la chistera puesta te puedes encontrar con montones de sorpresas mágicas... Gracias Tomae por darle ese toque de magia a los modernos e-mails.
    Besos desde el Sur, GranT

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  9. Bueno, los tiempos cambian pero no las palabras ni los sentimientos. Cierto es, que el sonido del papel rasgado se está perdiendo pero siempre quedará alguien que sepa agarrar un bolígrafo y disfrute escribiendo.
    Bs
    Mikuman

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    1. Desde luego, y si no es así, se estará perdiendo algo muy gozoso y satisfactorio.
      Un placer verte por estos lares.
      Besos, Miku

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